SOS

No había tenido un momento tan bueno durante semanas. La lesión me había privado de esa libertad que me proporciona el acto de correr y después de tanto tiempo estaba ahí contra todo obstáculo como la oscuridad del horario de invierno y una incipiente lluvia. Pero algo me decía que tenía que seguir adelante, ser constante y llegar a la meta. La panorámica de la lluvia iluminada a través de la luminaria y los faroles de los autos generaron una atmósfera única.

Esta semana compartiste un vídeo muy especial conmigo y el mensaje me llegó. Pero hoy esa lucha por cumplir la meta se convirtió en un momento de discordia entre nosotros. Intento ponerme en tus zapatos y entiendo tu pensamiento, pero hoy tus palabras me acribillaron como una metralleta. Siento un poco de angustia porque nuestra comunicación no está funcionando. No caí en la desesperación, pero cada día estamos convirtiéndonos en esa versión que detestamos de Jesse y Celine en Before Midnight.

A veces siento que muro grueso se está interponiendo entre nosotros, como un elefante en medio de una habitación... Espero que esto sea solo el recuerdo de un mal día...